Me uno a la celebración del Festival de Teatro de Caracas. Como crítico
teatral pienso que mi labor es una lectura del hecho escénico, más que un
juicio. Por esto, considero que el registro que hace el crítico cuando escribe
su lectura o apreciación de un determinado montaje deja memoria del quehacer
teatral. Esa es la razón de esta crónica.
La primera semana del festival ha servido de vitrina para la presentación
de espectáculos premiados como Penitentes
de Elio Palencia, montaje realizado por la agrupación Teatrela en la sala Juana
Sujo de la Casa del Artista. Su contundente propuesta en contra de los
prejuicios y la manipulación de los medios de comunicación volvió a retumbar,
gracias la pertinente dirección de Costa Palamides.
Otro trabajo digno de mención es Contra
el progreso, texto de Esteve Soler y dirección de Juan José Martín, presentado
por el grupo Escena de Caracas en la Sala Rajatabla. Un oportuno montaje acerca
de cómo el progreso se vuelve en contra del ser humano.
El teatro de vanguardia tuvo un digno representante en la Sala Rajatabla
con Crónicas Palahniuk de Teatro
Forte, dirección de Vladimir Vera. Sus monólogos descarnados y contrarios a
moral tradicional volvieron a perturbar al público.
Por su parte, el teatro para niños dijo presente con El popol vuh, versión y producción de Xiomara Moreno para su
agrupación homónima y dirección de Javier Moreno, que se escenificó en el
Teatro Principal. Este trabajo maravilla a adultos y niños por igual debido a la
claridad y pertinencia estética de su vestuario y ambientación, además de la
apropiada recreación del origen del ser humano según la cultura Maya.
Asimismo, el género de títeres tuvo su espacio con el colectivo Tempo,
proveniente del Estado Portuguesa, que presentó La abominable historia de Mr. Punch, dirección de Eduardo Di Mauro,
en el espacio ArteNativo y en el Nuevo “Nuevo Circo”. La pieza está dirigida a
un público adulto debido a su contenido sexual y de violencia, sin embargo
aprovecha poco esta circunstancia porque se siente que no quieren
extralimitarse en el lenguaje.
Como se ve, el festival permite la confrontación
con diversas propuestas escénicas.
(Para el Diario Ciudad Ccs)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario